Es una vergüenza, realmente es una vergüenza lo que el fujimorismo está haciendo en el Perú, el haber llevado al Congreso todo tipo de sinvergüenzas demuestra que es lo que piensan de nuestro país, a ellos no les interesa el bienestar de la población, solo les interesa su propio bienestar y hacerse del poder a como dé lugar.
Cuando uno escucha a Luis Galarreta en alguna entrevista se va a dar cuenta de eso, se ufana del poder que tiene y se burla de sus adversarios, como que el haber logrado que PPK renuncie, sea la muestra de poder que necesitaban para demostrar quien es el que manda realmente en el Perú.
El problema es que esos que se ufanan de tener el poder son exactamente los que no deberían tener ninguna cuota de poder (valga la redundancia). El caso de Yesenia Ponce lo confirma.
Yesenia Ponce es el fiel reflejo de una sociedad podrida donde no existen valores y donde la pendejada es el principio fundamental, yo lo he llamado siempre “individualismo chicha” y es que desde el fujimorato, la pendejada en el Perú ha sido empoderada a través de un falso individualismo que le otorga al vivo la facultad de hacer lo que le da la gana, así vemos como las combis se hicieron de las ciudades, como algunos negocios pequeños operan sin pagar impuestos, como grandes transnacionales piden se les condonen sus deudas tributarias y como un sin número de gente sin estudios falsifican certificados e inventan compañeros de estudios para poder llegar al Congreso. Lo peor de todo es que salen elegidos, ¿Quiénes votaron por ellos?
Pero lo que resulta increíble es que su misma bancada evite siquiera investigarla en el Congreso, las evidencias saltan a la vista, están los reportajes de televisión irrefutables, existe una investigación periodística que demuestra la falsedad de toda la información presentada por Yesenia Ponce y aún así el fujimorismo decide no investigar y archivar el caso. ¿Qué clase de Congreso tenemos? ¿Hasta cuándo vamos a seguir permitiendo que nos vean la cara de imbéciles? En otros países esto hubiera sido un escándalo mayúsculo, en Paraguay por menos incendiaron el Congreso, en otros lados botan a los Congresistas al basurero, ¿Qué estamos esperando para demostrar nuestro total repudio a esa burla descarada?
Lamentablemente lo que ocurre en el Congreso es el fiel reflejo de lo que ocurre en nuestra sociedad, ¿Vamos a seguir siendo así o queremos otro país para nuestros hijos?
Anibal Vera Tudela 